UNA IMAGEN ME HABLÓ Y LA ENCERRÉ EN ESTA FOTOGRAFÍA

Veneno pegajoso




En la Bahía de San Vicente, Chile, la empresa de petroleo ENAP Bio Bio ha cometido un homicidio ambiental. Uno de sus barcos en una maniobra sin cuidado, ha derramado petroleo en el mar. Están muriendo especies marinas (aves, mamíferos, plantas, moluscos) y quedarán sin trabajo cientos de hombres y mujeres que viven del mar.
Expertos profesionales auguraban que el desastre ecológico no llegaría màs allá de la Bahía, pero hoy, a 5 kilómetros desde donde vivo y a 10 metros al frente de decenas de personas que viven de la gastronomía marina, caleta Lenga, les ha llegado la marea negra.
Corrió la alerta.
El monstruo negro del petroleo se ha escurrido de las torpes manos
de quienes se creen expertos en las maniobras dificiles.
Déjenles a ellos la sabiduría de lo que se debe hacer,
déjenles a ellos los estudios y las cosas difíciles.


Ellos, los estudiosos dicen: "los pescadores no saben".


Pero han sido los pescadores que hace tiempo pregonaban que sucedería,
han sido ellos, sin calculadora ni lápiz,
que predicieron que la mancha llegaría a la caleta.
Y más encima el sabelotodo-jefe-sabiondo-experto- de la bahía,
había dicho que la tierra habría que darse vuelta
para que la mancha llegara hasta su caleta.
Pues los pescadores-quenosaben-noescriben-
han pronosticado lo que la vida de mar les ha enseñado.


Empresa ineficiente,
descuidada, déspota y asesina.
Quien devolverá la vida de los viejos lobos de mar,
de las aves madres que llevaban en su pico
el alimento molido a entregar a los polluelos.
Quien lavará las algas verdes que servían en el plato de los pescadores,
quién devolverá la marea limpia a los ojos
de quien quiera mirarlos.


¿Tu dinero?
¿Tu disculpa?
Devuélvete la mirada y averguénzate,
mira que el mar está llorando,
mira que la bahía está llorando...
y alguien màs,
también llora.