Y que pasa si un día

me monto en una nube,

atravieso el espacio

y me tumbo sobre una montaña

a esperar lo que se me regala?

Ella, mi gran trozo de azucar.

Ella , me despierta todas las mañanas con su risa de flor.
Por Ella, me detengo a ver juguetes en las tiendas, zapatitos de colores, libros de cuentos con tapa dura ( porque se come las hojas de los libros).
Ella, me pide trozos de galletas de mo boca, como polluelita alocada.
Ella, me regaña si no la llevo a la puerta que da a la calle a ver que pasa afuera. Hay tanto mundo metiendo boche que le interesa.
Ella, cree que las cortinas del ventanal son para jugar a las escondidas.
Ella, adora las burbujas salva pantalla que aparecen en mi computador.
Ella, adora las mandarinas.
Ella, adora caminar descalza.


Ella, se ha tragado mi corazón.

Sin prisa y con aliento,

con alegría... menos espanto,

esperan en su casa

aseada y pulcra

la muerte mientras tanto.

..

.

Con baile y a todo canto

con el mejor traje,

que lleguen los comensales

que la fiesta ha empezado.

.

.

Que no se tema a lo que viene,

que aunque no quieran

viene...

la muerte sin aviso,

es para todos igual.

.

.

Sin prisa.

(Mural de Valparaíso-Chile)

Albor

Mientras estaba en un pueblo llamado Malloco, al centro e interior del pais, en un Encuentro de dos dias con distintas organizaciones de mujeres que discutían acerca de las políticas públicas acerca de la violencia contra la mujer, descubrí esta puerta.

Lo curioso es que el lugar en que hospedábamos era un ex convento que ha quedado ahora como lugar de arriendo para seminarios y conferencias.

Era un lugar tan íntimo, especial para un encuentro de reflexiones.

De sus muchos lugares y rincones, me puse a buscar uno que representara la luz de la reflexión, especialmente tomando en cuenta que ahí hubo un convento de monjas que solo vivían para la oración y la reflexión. Y me encontré con esta puerta. Lo extraño es que estaba al final de un pasillo y al otro lado no había nada. Ni una sala ni nada.

¿Cuál sería su significado?

Una puerta siempre abre para un lugar.

Quizas haya sido hecha para personas como yo que no creemos en el dios cristiano, pero que sí creemos en el albor que puede dar la meditación con otros/as. Y del otro lado simplemente solo está la luz.

Una hermosa puerta.

Viajero

A donde vas Bernardo?

Acá voy, buscando natura, probando caminos.

Viendo el verdor que me rodea sin senda,

sin camino que me guíe.

A donde vas Bernardo?

No estás ya para ser un viejo cansado?

Qué dices?. Habla más fuerte!!

Mira que que ya agarré vuelo

y mis pasos me llevan de memoria por los parajes.

Bernardo!!! Cuidate viejo.

No hagas desarreglos!!

¿Arreglos?

Pero si en eso estoy.

Contando a los demás que arreglen el mundo

mira que ya no queda verde,

solo caminos guiados.

Mira este paraje,

nada me guía.

Solo el olor de la tarde,

la humedad del invierno que se va

y el canto del queltehue.

Bernardo, no te vayas tan lejos.

Regresa!!!!

Ah, por favor.

Si no te sumas al paso entonces ve a envejecerte.

Mira que yo tengo muchas cosas que hacer.

Javiera Ximena

24.- MazapanEn Una...

Mi niña, mi regalo,

mi sueño, mi obsequio no esperado.

.

Mi dulce argumento

para luchar por un mundo más justo y limpio.

.

Mi trocito de carne tibia y pura,

boquita que llora vida y más vida.

.

Mi cántaro para beber sueños y esperanzas,

mi luna para iluminarme en la oscuridad,

mi olorcito a leche de mami,

mis ojitos que encienden lo que no está.

.

Mi elemento que faltaba

para concretar aún más la esperanza.

Mi esperanza.

Soñadores

¿Qué es esto? Nos avisaron que veríamos un humedal.

Una especie de esponja húmeda que alberga al coipo nativo de las tierras chilenas.

¿Dónde está el pájaro de siete colores?

Ansiaba contar sus colores , saber cuales eran,

con que plumas los lucía.

¿Y las totoras?

Amigas, dónde están las totoras.

Los humedales se vanaglorian de ellas.

Espigadas y señoriales. No las veo en ningún lado.

Los juncos, el huiro, el batro, el huechencó.

La yerba medicinal "siete venas, crecía acá como loca,

dónde está la menta,

esa que cura las penas.

Dónde está el puye, la pocha,

la rana que canta cuando el otoño se acerca

dando aviso que pronto habrá que guarecerse de leña.

Dónde está la culebra que retoza con el sol

asustando a los niños que buscan tesoros del humedal.

La lagartija que sorprende son sus colores híbiridos.

Dónde están las taguas, los cisnes.

Dónde se ha ido el chincol, el tordo, el pato,

el chirigue, el gorrión.

Ya no preguntes amiga.

Nos han dicho que conoceríamos un humedal,

pero nadie habló de ver su biodiversidad.

Pregunta a las empresas que compran los humedales y los rellenan

para construir viviendas, edificios, cemento.

Pregunta a quiénes no tienen donde dejar su basura

y ven que el humedal es tierra buena para sus desechos .

Ellos no vieron aquellos seres,

no escucharon sus graznidos,

no supieron del llamado del otoño en la rana,

no olfatearon las yerbas aromáticas

ni supieron de la culebra asolapada.

Ellos no vieron.

no supieron.